Imagen de artofselfhood.com

Imagen de artofselfhood.com

No me veo como antes. Más barriga, menos masa muscular. ¿Te suena familiar? Hubo cambios, lo entiendo perfectamente. Una boda (¿o más de una?), hijos, nuevas responsabilidades…

Pienso, ¿qué hacía antes, cuando estaba en mejor forma? Pues claro, hacía muchísimo más ejercicio y escogía mejor mis comidas.

Volvamos a lo básico. Apliquemos este análisis, uno por uno, a cada área de nuestras vidas.

Mi vida espiritual, ¿era más llena y apasionada antes? ¿Qué hacía en esa época que no estoy haciendo ahora? ¿Económicamente estaba mejor antes? ¿Qué hacía en esa época que no estoy haciendo ahora? ¿Habían tiempos mejores en mi relación de pareja o en mis relaciones familiares? ¿Qué hacía en esa época que no estoy haciendo ahora?

Volvamos a lo básico y retomemos lo mejor.