*(1er lugar- Certamen Literario Universidad Metropolitana Bayamon 2010)
En mi búsqueda constante
de un balance perfecto,
nunca lo encuentro.
Considero muy escasa la paz,
solo la logro por instantes.
Supongo que de esto se trata este reto:
Intentar ser feliz por completo,
¿Podré ser capaz?
Las experiencias hay que vivirlas
y todas las emociones sentirlas,
pues de esto consiste la vida.
El sol solo alumbra de día,
pero que no te reproche la noche,
pues con ella también se halla luz.
Aun sin la luna menguante,
si las nubes opacan diamantes,
sólo debo acercarme y tocarte
y experimentar al besarte,
la desaparición de la oscuridad,
ver el milagro de la claridad.
Generar energía de nuestro calor,
haciendo la luz, haciendo el amor,
subir a las estrellas para con ellas jugar
o bajarlas a que nos acompañen en nuestro lugar.
Hay que caminar para poder apreciar
la belleza de este gran paisaje
aun con vista fui ciego
mas ahora con mis ojos leo el mensaje.
En mi tragicomedia
he podido reír
he podido viajar
pero últimamente,
cuánta falta me ha hecho llorar.
En lo poco que he vivido, he aprendido
que lo más que anhelo, llega cuando menos lo espero.
¿Por qué no lo aplico?
Decido seguir en este conflicto.
Sería tan fácil decir que no te deseo
y mentir,
pero más difícil creerme que no te quiero
y sonreír.
Ignorar mi sed insaciable por ti
pues quiero tomarte
y en cada sorbo detenerme y disfrutarte.
Me quiero callar y solo soplar
y en cada aire expirar mis pensamientos,
¡Que se acabe ya lo que siento!
Esto no te lo quiero expresar,
te pudieras alejar hasta más
y me da miedo.
Así que grito en silencio
y cada vez que te vas me arrepiento.
Mi pecho es halado por ti,
qué olor…
Como polos magnéticos opuestos,
naturalmente me acerco.
Pero como la morí-viví,
al poner mis dedos en ti
retractas defensiva y atónita
y con la herida en el alma me alejo.
Considero conocer algo de los procesos,
creo que sé lo que debo hacer:
intentar restablecer el balance energético
y dejar al tiempo el control ejercer.
Volver a querer ser solo tu amigo
y disfrutar apaciblemente estar junto a ti.
Espero no te pase
lo que me pasó a mí contigo,
Si después algún día
quisieras algo de mí.
-Héctor Millán
2007