¿Sabes hasta cuando David fue menospreciado? Hasta después de vencer a Goliat.
¿Qué le dio autoridad para pelear contra Goliat? Haber vencido anteriormente contra leones y osos.
¿No estas conforme con el lugar donde estás? Dios ha permitido ya varios Goliat en tu vida en estos últimos años, peleas diseñadas para catapultarte hacia donde debes estar. Pero tal vez por no haber vencido todavía contra las peleas de ayer, no has tenido autoridad para entrar en el ring con Goliat hoy.
Hay peleas que se están dando ahora mismo a tu alrededor, que no has podido ni comenzar a pelear porque todavía estas luchando contra los leones y los osos que te correspondían vencer ayer.
¿Cuánto más vas a esperar?
Es tiempo ya de vencer los retos que te amenazaron en el tiempo pasado, y de pasar a lo que te corresponde hoy. Goliat ruge esperándote, y detrás de él, la conquista que te va a impulsar al palacio donde debes estar.