Dios utilizó estas oraciones para sanar mi corazón, hace un tiempo atrás, luego de traiciones y fuertes faltas de respeto.
Realmente fue una oración bien larga, posiblemente 1 hora en este clamor que se dio en niveles.
El primer nivel fue una intercesión, comencé pidiéndole a Dios que perdonara a estas personas. Honestamente, le pedí a Dios que los perdonara porque yo mismo no estaba listo todavía para perdonarlos.
Pero luego de entrar en intercesión genuina por ellos, pude comenzar a conectarme con el Espíritu Santo, quien me llevó al segundo nivel: yo perdonar.
Comencé a pedirle ayuda a Dios para perdonar. Comencé a pedirle que removiera todo coraje y rencor de mi corazón. No fue fácil. Requirió sinceridad, decirle a Dios cómo me sentía con desahogos transparentes. En este nivel estuve más de 20 minutos, hasta que las lágrimas empezaron a fluir. Pude sentir el dulce consuelo del Consolador.
Entonces el Espíritu me llevó al tercer nivel: desear el bien para las personas que me habían lastimado. No fue nada fácil. Entiendo porqué el Espíritu tuvo que quebrantarme antes de llevarme a este nivel. Yo me sentía ofendido, aprovechado, traicionado… pero el Espíritu puso en mis labios esta oración: Padre, bendícelos.
Al principio no lo decía de corazón. Mi carne quería justicia.
Pero poco a poco, entre llantos, seguía repitiendo la oración, declarando bendición sobre sus vidas, sus familias, su salud, sus corazones… hasta que la oración llegó a mi corazón y pude ser sano.
Parte del mensaje “Restauración de Relaciones”, puedes verlo aquí: